El Gobierno reforzó el operativo de emergencia desplegado en Salta, con el envío de insumos, medios de transporte y equipos especializados para colaborar con las fuerzas locales en las tareas de asistencia a las familias que sufren las consecuencias de la crecida del río Pilcomayo.

La Secretaría de Protección Civil del Ministerio de Seguridad de la Nación articula las acciones de las fuerzas federales y de distintos ministerios y organismos nacionales, en coordinación con la provincia, los municipios y diversas ONGs, en el marco del Comité de Crisis que funciona en el municipio de Santa Victoria Este, el más comprometido por las inundaciones.

Efectivos de Gendarmería y el Ejército intervinieron en el armado de un campamento, en el kilómetro 79 de la ruta provincial 54, donde las familias disponen de servicios esenciales y reciben alimentos y atención de salud básica.

La colaboración se extiende a otros centros que se montaron para atender a los afectados y, al mismo tiempo, los efectivos realizan relevamientos en las zonas más castigadas con el objetivo de ampliar la asistencia a la población.

En parajes aislados, actúan con ayuda de vehículos terrestres de gran porte, botes y medios aéreos junto a agentes de la policía, bomberos y Defensa Civil.

El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación despachó un  cargamento con tirantes, colchones, frazadas, elementos de higiene personal y módulos de alimentos.

En tanto, funcionarios de la cartera viajarán en las próximas horas para coordinar con las autoridades salteñas un mayor nivel de asistencia.

El Ministerio de Salud de la Nación, a su vez, envió pastillas potabilizadoras y distintas partidas de suero antiofídico para atender mordeduras de serpientes.

También colaboran equipos especializados del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) y funcionarios de la Secretaría de Vivienda y Hábitat del Ministerio del Interior. Agentes de Gendarmería ayudar a restablecer la conectividad vial.