En la última semana se realizaron quince inspecciones en galpones de los barrios de Constitución y Retiro, donde se secuestraron más de 118 kilogramos de cable de cobre y de fibra óptica de procedencia ilícita, y cinco de ellos terminaron clausurados.

Los procedimientos fueron realizados por efectivos de la División Sumarios y Brigadas de la Comisaría Comunal 1 de la Policía de la Ciudad junto a inspectores de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), representantes de las empresas de internet y personal de la Dirección General de Coordinación Operativa, dependiente de la Secretaría de Justicia y Seguridad.

En total, entre todos los procedimientos se llegaron a incautar 118,150 kilogramos de cable de cobre y fibra óptica.

Debido a varios hechos de sustracción de cables de las empresas de telefonía e Internet se procedió a realizar estas inspecciones en los locales y galpones conocidos como “metaleras” que se dedican a reducir metal provenientes de chatarra y desguaces.

El cable utilizado por las empresas de telefonía e Internet es fácilmente rastreable ya que no se comercializa en los locales del ramo por lo cual estas inspecciones apuntan a los comercios que compran el material robado.

Se inspeccionaron en la primera jornada unas cuatro chatarrerías ubicadas en el barrio de Constitución, donde se secuestraron 81,650 kilos de cable de cobre y dos baterías. Además, la AGC procedió a la clausura de dos de los locales, uno de ellos por violación de clausura.

La actividad continuó con la visita a seis galpones de la zona Constitución y en uno de ellos, en Salta al 1400, se encontraron 14 kilogramos de cable de cobre y de fibra óptica con la inscripción de una empresa telefónica.

El Juzgado Criminal y Correccional Número 31, Secretaría 119 de la doctora Natalia Di Nardo, avaló lo actuado por el personal policial y ordenó el secuestro de los elementos encontrados como así también la notificación de cada uno de los encargados de las instalaciones inspeccionadas.

Las inspecciones siguieron en el Barrio 31 de Retiro, donde los efectivos visitaron cinco galpones y encontraron unos 22,500 kilogramos de cable de cobre de procedencia ilícita.

La AGC clausuró tres depósitos en esta recorrida por irregularidades en la habilitación.

Al consultar con el Juzgado Criminal y Correccional Número 7, Secretaría 121 de la doctora Silvina Damiano, se dispuso identificar a los responsables de las propiedades y secuestrar todo el material hallado.