Residuos: nueva estrategia sin contenedores
26 Septiembre 2025
Puerto Madero dejó atrás los contenedores en la vía pública y adoptó un sistema de recolección puerta a puerta. La iniciativa del Gobierno porteño, que comenzó como prueba piloto, ya es utilizada por vecinos, edificios, comercios y empresas, y busca mejorar la limpieza, el orden y la circulación en uno de los barrios más visitados de la Ciudad.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires puso en marcha en Puerto Madero un innovador esquema de recolección de residuos puerta a puerta, que reemplaza a los contenedores en la vía pública. La novedad representa un cambio positivo para quienes viven y trabajan en Puerto Madero, así como también beneficia a los visitantes que pasean por sus calles todos los días.
De esta forma, Puerto Madero se convirtió en el primer barrio porteño en implementar un modelo de recolección de residuos puerta a puerta, que reemplaza a los contenedores en la vía pública. La medida busca adaptarse a las características de la zona, marcada por una alta densidad de edificios con consorcios y la presencia de grandes generadores como locales gastronómicos, empresas y comercios.
“La descontenerización de Puerto Madero es un paso concreto hacia una Ciudad más sustentable. El nuevo sistema de recolección refleja una decisión clara: ordenar el espacio público, garantizar más limpieza y simplificar los servicios para los vecinos. Además, responde a la particularidad del barrio que está compuesto por consorcios, locales gastronómicos y comercios”, señaló el ministro de Espacio Público e Higiene Urbana, Ignacio Baistrocchi.
El proceso comenzó en enero con una prueba piloto y se completó en cuatro etapas que implicaron la remoción de 135 contenedores y la incorporación de 59 puntos de recolección puerta a puerta, que permiten atender a más de 200 generadores del barrio. Según datos oficiales, el sistema gestiona más de 10 toneladas diarias de residuos húmedos y más de 5 toneladas de reciclables, que ahora se retiran edificio por edificio mediante la empresa concesionaria.
De acuerdo al Gobierno porteño, la modalidad reduce la basura en la calle, evita malos olores y mejora la limpieza del espacio público. En paralelo, se realizaron más de diez jornadas de concientización con vecinos y comerciantes, que incluyeron entrega de folletería y reuniones informativas.
El nuevo sistema mantiene la frecuencia habitual del servicio y conserva el esquema de recolección diferenciada de reciclables. Además, se implementó un sistema de inspecciones en más de 80 puntos de recolección privada para supervisar el correcto funcionamiento.
Con esta medida, la Ciudad busca consolidar un modelo de gestión de residuos más eficiente y ordenado, en línea con las experiencias de otras grandes capitales del mundo.